jueves, 1 de marzo de 2007

Desfachatez



Cuando una persona o un grupo de personas tienen una repercusión pública, bien porque son personalidades políticas, judiciales, periodistas o cualquier persona que goza de una palestra desde la cual sus palabras adquieren un eco mediático, tiene, o debería tener, sentido de la responsabilidad a la hora de hablar.
Cuando quien carece de esta falta de responsabilidad es alguien que ha tenido, y aspira a volver a tener, responsabilidades de gobierno, el escándalo es aún mayor.
No se puede calumniar impunemente con el único fin de conseguir unos resultados electorales mas favorables. Incluso un oficio tan poco caballeresco como la política debe tener unos límites.
Debe tenerlos porque desde ese altavoz del que gozan los políticos, llegan a muchas personas, y obviamente, por desmesurada que sea la barbaridad, hay quien se la cree. Y el problema de eso es que se genera una crispación muy poco deseable en política. No se puede estar sacando a la gente a la calle cada dos por tres para protestar solo porqué tu talante antidemocrático te impide aceptar que perdiste las elecciones porqué mentiste. Y lejos de caer en la cuenta de tu error, sigues mintiendo, pensando que la mentira te llevará de nuevo al poder. Y como dice George Clooney en Abierto hasta el amanecer : "puede que sea un cabrón, pero no soy un puto cabrón", yo puedo decirles lo mismo a ustedes, señores Zaplana, Rajoy, y sobretodo señor Acebes, ya que usted, junto con el iluminado Sr. Aznar pasarán a la historia como los mayores mentirosos de la democracia en España. Si usted tuviese un mínimo de dignidad, solo un mínimo, después de haber perdido las elecciones del 14-M se hubiese ido a su casa. Quizá el título de la entrada debería ser dignidad, y no desfachatez. Como les decía, parafraseando a Clooney, puede que seamos tontos, pero no somos tontos del culo.

Y aun siguen con lo mismo, lejos de caérseles la cara de vergüenza, siguen saliendo por televisión dándonos lecciones de democracia a los que somos hijos y nietos de gente que lucho contra la dictadura mientras sus familiares ocupaban cargos de gobierno en el régimen de Franco. Me da asco ver como ahora son los máximos defensores de la constitución que no votaron y no apoyaron.

Y todo esto viene, porque asistimos al juicio del 11-M, y aun tenemos a estos señores, que ahora, después de calumniar hasta la extenuación al mas puro estilo Goebbels ( es irrelevante si lo que dices es cierto o no, lo verdaderamente relevante es repetirlo tantas veces sea necesario para que la gente se lo crea), ahora se escudan, para mantener sus argumentos, que ellos expresan la inquietud de una parte importante de la ciudadania.

Es espectacular convencer a un grupo de personas de una mentira, y cuando las tienes convencidas de TU mentira, escudarte en ellas para mantenerla.